SEMANA MUNDIAL DEL DESARME

Entre el 24 y el 30 de octubre la Organización de las Naciones Unidas propone la Semana del Desarme, que comienza el día del aniversario de la fundación de las Naciones Unidas.

Se invitó a los Estados a difundir información sobre el peligro de la carrera de armamentos, a dar a conocer la necesidad de que cesara la proliferación y a fomentar un mayor entendimiento sobre la urgencia de del desarme y una mejor comprensión de los problemas relacionados con la carrera armamentística.

Aquí algunas cifras que dan cuenta de una situación complejísima que embarga la libertad y da cuenta de una industria inmensa que mueve capitales de aquí para allá, en todo el mundo y también en Argentina.

Según sostiene el sitio web de Armas bajo Control “cada año se fabrican 16 mil millones de municiones en el mundo”. Otro informe, “El comercio mundial de armas, peligrosamente falto de control”, se refiere a cómo la posesión de armas cada vez más letales se está volviendo parte integrante de la vida cotidiana en muchos lugares del mundo. Entre los agricultores del norte de Uganda, por ejemplo, los rifles AK47 están sustituyendo a las lanzas; en Somalia se llama a los niños “Uzi” o “AK”; en Irak ya hay más de un arma de fuego por habitante.

¿Quién lidera la industria de las armas a escala planetaria? Estados Unidos lleva la delantera: es el principal fabricante, importador y exportador. Las compañías estadounidenses producen la mitad de las armas en el mundo. El Pentágono es el mayor vendedor de armas del mundo. En 2002, las operaciones financieras en ventas de armas de Estados Unidos alcanzaron unos 13,300 millones de dólares, lo que podría traducirse en el 45,5 por ciento de las ventas globales de armas convencionales, o en un aumento de 1,200 millones respecto a 2001.